Fuente: El Destape

Mientras el Gobierno elige fragancias, el subte es una catarata

No estás equivocado, el subte funciona mal y el Gobierno porteño se preocupa en temas insólitos.

Servicio caro y paupérrimo. Eso es lo que los usuarios del Subte de Buenos Aires experimentan a partir de este sábado 15 de diciembre, con el nuevo aumento del boleto, que asciende a los $14,50, en medio de una semana signada por dos temporales que inundaron las estaciones.

La linea H, la más nueva e inaugurada durante la gestión de Mauricio Macri, volvió a sufrir grandes inundaciones a raíz de las fuertes lluvias que atravesaron la Ciudad de Buenos Aires durante la madrugada del lunes.

Para colmo, las cascadas llegaron a tocar las formaciones metálicas, lo que representa un gran peligro para los usuarios por el contacto del agua con artefactos eléctricos. La misma experiencia se vivió en la linea D durante el último jueves, donde el agua ingresó por la ventanas abiertas de las formaciones a los asientos de los pasajeros.

"Inundados pero con olor a vainilla", bromearon los usuarios en las redes sociales en referencia a la reciente encuesta de Metrovías, empresa concesionaria del sistema de subterráneos, para que los usuarios eligieran la fragancia del subte.

También otras líneas se vieron afectadas: La A, tuvo complicaciones en estaciones como San Pedrito, mientras que la B no se detuvo en Callao ya que se encontraba anegada. Mientras que el boulevard del Obelisco resulto prácticamente intransitable por el anegamiento.

En paralelo, y paradójicamente, el Gobierno porteño se preocupa en planear la "digitalización del subte" para que el usuario, por ejemplo, pueda conocer cómo se encuentra la línea con sólo observar una aplicación de su celular, o que el personal sea advertido en pocos segundos sobre alguna falla en una escalera mecánica, adelantaron.


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